La labor del vendedor es posiblemente uno de los oficios más antiguos que existen, pero no por ello es de los más evolucionados y valorados. Sin embargo, según un estudio realizado por Foromarketing.com, el arte de las ventas es una profesión que carece de caducidad, es decir, a cualquier edad se puede ser un buen profesional de las ventas.
Para las empresas, es vital reconocer que para ser realmente competitivas y posicionarse de forma estratégica en su mercado es necesario contar con un buen equipo de ventas, pues a la postre el vendedor es el mejor aliado en el camino al éxito.
En esta relación, existen ciertos puntos que la empresa debe inculcar como mandamientos a todos sus vendedores para asegurar que su trabajo sea exitoso. Aquí te presentamos las 15 reglas más esenciales:
- El vendedor debe saber comunicar su producto, su empresa y su saber hacer, ya que es la clave del éxito.
- Es esencial que sepa escuchar y conocer las necesidades reales del cliente.
- El vendedor debe tratar a los clientes como si fueran socios del negocio.
- Tener conciencia de que un cliente fidelizado acepta de mejor manera la política de precios y actúa como el mejor divulgador de la empresa.
- Conocer a los clientes. Sólo así podrá influenciarlo e, incluso, controlarlo.
- El vendedor ha de saber convertir los problemas de los clientes en oportunidades de negocio, aportándoles soluciones.
- Preocuparse por saber aportar imagen positiva, tanto de la empresa como de su saber hacer.
- Hay dos cosas que no puede hacer el vendedor: dudar y quedarse mudo. Si usted asesora, debe tener respuestas siempre.
- Conocimiento de la competencia: averiguar cómo, qué y a qué precio venden los demás. Podrás incluso utilizarlo como argumento de venta.
- Estrategia de venta. Tener clara la línea de negocio que se quiere seguir así como la política de precios que se desea adoptar.
- Conocer ampliamente el producto o servicio que vende. Cuanto más profundice, mejor. Sólo así estará preparado para responder todo tipo de preguntas.
- Sepa cómo disculparse. Puede que el cliente no siempre tenga la razón, pero cuando algo sale mal, la mejor alternativa es disculparse.
- Piensa en ganar un cliente para la empresa, más que en sólo vender.
- Recuerda que un cliente bien atendido por lo general se convierte en un cliente que factura.
- Un buen vendedor tiene dimensión ética. No promete sin estar seguro.
Fuente: entrepreneur.com.
Autor: Sofía Ugalde.