Asertividad, el arte de actuar bien… siempre! 5 pasos para conseguirlo La asertividad es una habilidad que te permite ser eficiente, tomar decisiones, establecer límites y aprovechar al máximo tus canales de comunicación.

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La asertividad es uno de los valores más deseables en y por los profesionales. Todo mundo quisiera tener las palabras y la actitud adecuadas ante cualquier circunstancia y en cualquier momento.

Ser asertivos significa saber actuar, utilizar de manera efectiva los canales de comunicación, tener un desempeño eficiente, ser seguro de sí mismo y aprovecharlo al máximo; también significa saber trabajar en equipo, establecer límites, correr riesgos, tomar decisiones, explotar los recursos y solicitar ayuda cuando es necesario, tener determinación y ser conciliador. En pocas palabras, ser asertivo es ser eficiente.

Por ello, en Jobomas te compartimos algunos tips para convertir la asertividad en un hábito que te permita mejorar tu desempeño profesional y en una habilidad que impulse hacia el éxito tu carrera laboral. Toma nota:

 

#1. No confundas

Asertividad no es lo mismo que agresividad. Establecer límites o defender puntos de vista jamás debe confundirse con imponer criterios. Para ser asertivos hay que saber reconocer los momentos más oportunos para actuar y jamás perder la compostura pues el respeto y la educación son fundamentales en el desarrollo de esta habilidad. Analiza la forma en que interactúas con otros y recuerda que la conciliación es una de las claves del comportamiento asertivo.

 

#2. Comprende

No sólo la agresividad es una de las conductas que te impide ser asertivo, también está su contraparte, la sumisión. Reflexiona sobre las causas que te hacen actuar de una u otra forma o reaccionar de cierta manera ante diversas circunstancias. Si vas a entrenarte en el hábito de ser asertivo debes conocerte a ti mismo y aprender a dominar tus impulsos con inteligencia emocional pero también debes ser capaz de comprender al resto de los profesionales que te rodean (colegas, jefes, clientes, etcétera).

 

#3. Cambia y actúa

Analiza las situaciones bajo las que crees que no estás actuando de manera adecuada y enlístalas de manera que puedas hacerte consciente de ellas y actuar en consecuencia. Una recomendación es asignarle a estas circunstancias una calificación (del 1 al 10) que nos permita ver el grado de dificultad con que nos enfrentamos a ellas, como por ejemplo, pedir un aumento, solicitar ayuda para un trabajo, negarte a una tarea; una vez que que hayas terminado la lista debes modificar tu actitud y comenzar a resolver tus lista de pendientes desde la situación de menor dificultad hasta la más compleja.

 

#4. Ensaya

Dice la sabiduría popular que "la práctica hace al maestro". Busca respuestas adecuadas para los diferentes desafíos que enfrentes y practícalas tantas veces como sea necesario hasta que tu reacción sea prácticamente automática. Recuerda que el lenguaje corporal también comunica y es fundamental en para desarrollar un comportamiento asertivo.

 

#5. Aprende

Quédate muy pendiente de los avances que registres con tu habilidad asertiva y aprende de ellos. Si has cumplido ciertas metas, date cuenta de lo positivo que resulta tener un comportamiento asertivo y compara esta experiencia con el hecho de quedarte paralizado o actuar de manera incorrecta. Todo es cuestión de resultados.

 

Trabaja mucho en tu autoestima; busca convertirte en un profesional seguro de tí mismo y prepárate para crecer en todos los aspectos de tu vida.

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