¿Romance en la oficina? Toma precauciones Existen compañías que pueden tomar medidas drásticas antes éstas situaciones.

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Debido a que en el trabajo se pasa la mayor parte del día es lógico pensar que surjan los romances en la oficina. Aunque éste es un tema que tiene muchas opiniones tanto a favor como en contra, el problema es cómo manejarlo sin que se afecte el trabajo, debilite la carrera y/o sufra la imagen profesional.

Muchas empresas para evitar estas situaciones han establecidos códigos éticos dónde se indica con claridad que al momento de detectarse esta relaciones, se transferirá a uno de los involucrados a otra área o sector de la organización, pero existen otras compañías que pueden tomar medidas más drásticas. ¿Qué se puede hacer al respecto?

Lo dice la estadística: 4 de cada 10 personas tienen amoríos en el trabajo. Te compartimos las siguientes recomendaciones para que el final de una relación no signifique el despido: 

1.- Ser discretos. Discreción es la palabra clave cuando se habla de los romances de oficina lo cual significa cuidar la relación de los comentarios mal intencionados de los compañeros y de los jefes. Para ello, es necesario no llamar a la otra persona cuando se está en horas laborables o dentro de la empresa. Es mejor esperar para después de la salida. Tampoco resulta conveniente comentarlo con compañeros por más confianza que se manifieste. Igualmente, se debe evitar utilizar la oficina no tener escenas románticas y respetar el espacio que tiene la otra persona y sus compromisos laborales.

2.- Evitar situaciones incómodas relacionadas con conflicto de intereses. Cuando se quiere a alguien es difícil, muchas veces, ser objetivo sobre esa persona, ya que no se quiere ver los defectos o puntos que debe mejorar, y esto puede traer serios problemas en el lugar de trabajo, pues podría interferir hasta con el funcionamiento de la empresa. Por esa razón, se recomienda mantenerse al margen del desempeño o trabajo de él o ella, y no opinar sobre ello ni para bien ni para mal.

3.- Conocerse bien antes de dar el primer paso. Entre mejor vaya la relación, menos riesgo habrá de tener reacciones inapropiadas en el lugar de trabajo. Para lograr esto, se recomienda que las personas se conozcan bien antes de dar cualquier paso. Es necesario, entonces, llevar una buena comunicación y entendimiento de ambas partes. Por supuesto, es necesario ser consciente de que van a rumorar en positivo y negativo de la situación. En otras palabras, se debe estar consciente de los riesgos que atañen la relación intralaboral especialmente cuando va mal, ya que trabajar con la otra persona a diario cuando se ha roto la relación y no demostrar malestar o resentimiento alguno (se tiene que ser amable profesionalmente) puede ser más difícil de manejar de lo que parece y causar mucho estrés Incluso existen persona que al no soportar la situación deciden buscar empleo en otra parte.

Tomando en cuenta todo lo anterior, un romance en la oficina es un riesgo que puede afectar seriamente la imagen profesional sino se maneja de forma adecuada y, además, se debe estar muy consciente de sus posibles consecuencias.

Fuente: Villahermosa Empleos

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